Por Andreína González
En las últimas semanas, y con el aumento de casos positivos por Covid-19, Chile ha retomó las medidas sanitarias y las restricciones de desplazamiento que parecían haber quedado atrás. El 25 de marzo, 13,7 millones de personas regresaron al confinamiento total, siendo habitantes de la Región Metropolitana más de la mitad de esta cifra.
Ante esto, la industria hotelera volvió a recibir malas noticias en su proceso de recuperación, el cual estaba siendo esperanzador tras el verano pasado, en la que algunos turistas pudieron disfrutar de sus instalaciones si contaban con su permiso de vacaciones y su pasaporte sanitario.
Un 57% de hoteles a nivel nacional tiene sus puertas cerradas debido a la pandemia y, a consecuencia de la misma, los proyectos para edificacion de hoteles han disminuido en comparación a años anteriores. En el 2019, la Región Metropolitana recibió 8 permisos de edificación, mientras que el año pasado apenas recibió 3.
Finalmente, después del anuncio de las últimas restricciones, las reservas disminuyeron y la imposibilidad de desplazamiento provocó la cancelación de otras hechas con anterioridad, lo que significó la devolución de dinero en muchos casos.
Para tratar de contrarrestar las bajas ventas, los representantes de los sectores gastronómicos, hoteleros y turísticos, además de pedir al gobierno que haya más flexibilidad con las restricciones, propusieron un “carnet verde”, un documento que se otorgue a las personas con las dos dosis de vacuna contra el COVID-19 para que así puedan disfrutar de estos pasatiempos.
Fuente y noticia completa: acop.cl